Oil pulling
Descubre todas las propiedades y beneficios del oil pulling para tu salud dental.
¿Qué es el Oil pulling?
El oil pulling es una técnica de higiene bucal en la que se utiliza aceite (comúnmente aceite de sésamo o coco) para limpiar los dientes y las encías.
El aceite ayuda a atrapar y eliminar las bacterias y los residuos en la boca, lo que puede mejorar la salud dental y la frescura del aliento.
Ventajas del oil pulling
Algunas de las ventajas de esta técnica son:
¿Cómo se realiza el oil pulling?
Es una técnica de limpieza bucal que consiste en colocar una cucharada de aceite (generalmente aceite de coco) en la boca y masticarlo durante unos 15-20 minutos antes de escupirlo y enjuagar la boca con agua.
Se recomienda realizar esta técnica en ayunas, antes de cepillarse los dientes.
Beneficios del oil pulling
Algunos de estos beneficios incluyen:
Oil pulling: efectos secundarios y contraindicaciones
Algunas personas pueden experimentar efectos secundarios del oil pulling, como molestias en la mandíbula, dolores de cabeza o náuseas.
Las contraindicaciones del oil pulling más comunes son:
- Problemas de masticación o deglución: Si tiene dificultad para masticar o deglutir, es posible que no sea adecuado para ti.
- Problemas de la articulación temporomandibular (ATM): Puede agravar los síntomas de ATM, como dolor y ruido en la mandíbula.
- Problemas de dientes: Si tienes dientes flojos o prótesis dentales, el oil pulling puede afectar su estabilidad.
- Embarazo y lactancia: No se ha estudiado suficientemente el oil pulling en mujeres embarazadas o lactantes, por lo que se recomienda evitarlo durante esos periodos.
- Alergias a los aceites: Si eres alérgico a algún aceite utilizado en el proceso de oil pulling, debes evitarlo.
Es adecuado consultar con tu dentista o médico antes de comenzar cualquier tratamiento de higiene oral.
¿Qué aceite utilizar para el oil pulling?
El aceite más comúnmente utilizado en el oil pulling es el aceite de sésamo, debido a sus propiedades antiinflamatorias y antibacterianas.
Sin embargo, también se pueden utilizar otros aceites como el aceite de coco, aceite de oliva, aceite de girasol, aceite de mct y aceite de árbol de té.
Asegúrate de utilizar aceite crudo, no refinado, ya que los procesos de refinado pueden eliminar los beneficios para la salud del aceite.